Este lugar me queda perfecto. Siempre encuentro lo que necesito, wi-fi gratis, 24 horas de seguridad, y una cocina compartida para preparar lo que quiero. Recuerdo que me ayudaron a devolverme lo que olvidé en mi primera estancia. ¡Volveré para navidad!

la casa es mona, pero el barrio, cón una estética deplorable, deja mucho que desear. El desayuno casi inexistente, podrían al menos ofrecer leche y no insinuar que la compremos. Además, esperé un regalo de bienvenida que nunca llegó. pensé en dejar una buena reseña, pero simplemente no pude.

La habitación era amplia y cómoda.

La limpieza solo se realizaba cada 7 días y no hubo cambio de toallas. Además, el desayuno fue bastante escaso y repetitivo durante mis 4 noches. solo ofrecían fruta y tostadas. La ubicación no es nada atractiva, ya que el barrio tiene una estética deplorable y no hay mucho que ver a pie.

Un patio encantador para comenzar el día

La casa tiene un patio precioso donde disfrutamos del desayuno. La cama es muy cómoda y la ubicación es ideal, cerca de restaurantes y supermercados. Laura es muy amable y atenta con los huéspedes, siempre dispuesta a ayudar.

La privacidad de nuestra habitación fue limitada, ya que daba al patio y, si había otros huéspedes fuera, podíamos vernos. Además, el desayuno podría ser un poco más variado, ya que solo incluía lo básico.

El proceso de check-in es muy fácil, la cama es cómoda, se incluye el desayuno, la atención al cliente es excelente – simplemente encantador.

La casa tiene un encanto único y la habitación, junto con el baño, eran amplias y cómodas. El desayuno era bueno y variado, lo que nos permitió empezar el día con energía. Además, su ubicación es muy buena, cerca de varios lugares interesantes como el Museo Internacional de Arte Contemporáneo y la Plaza de El Almacen, a los cuales se puede llegar en poco tiempo. Durante nuestra estancia, nos comunicamos con Laura, quien estuvo siempre atenta a nuestras dudas y necesidades, aunque no coincidimos directamente con ella. Sin duda, volvería a considerar este lugar si regreso a la isla.

Cama cómoda, netamente adultos, buen patio para desayunar, pero no tienen teteras.

Casa Mocan es un lugar encantador en el viejo Arrecife. La habitación era acogedora, con un desayuno variado cada mañana que incluía deliciosas frutas y opciones vegetarianas. Laura, la anfitriona, fue siempre amable y atenta a nuestras necesidades. La terraza común es perfecta para disfrutar el desayuno al aire libre.

Un lugar encantador!

La casa es una monada. La habitación era amplia y cómoda, lo cual es genial. El desayuno está bien, básico pero suficiente, y me encantó que lo dejen listo cada noche. El patio es perfecto para desayunar al aire libre. Lo único es que la limpieza podía ser más frecuente, ya que solo se hacía cada 7 días.